domingo, 10 de marzo de 2013
Seis mil policías esperan en Leeds al "destripador de Yorkshire"
En un día de frío y nieve, la ciudad de Leeds, custodiada por 6.000 policías y doscientos detectives, vivió ayer en estado de psicosis. El jueves por la noche se recibieron en la. enfermería general de Leeds tres llamadas de un hombre que pretendía ser el destripador de Yorkshire. Dijo que actuaría ayer noche de nuevo, siendo su próxima víctima una enfermera de dicho centro.El hospital fue puesto en estado de alerta. La policía acompaña a todas las enfermeras en sus desplazamientos fuera del hospital y recomienda que no salga ninguna mujer sola por la ciudad. Aunque se cree que estas llamadas eran falsas, como la que recibió el Daily Mail hace justo una semana, la policía declaró no poder ignorar estas amenazas.
El jueves por la noche, los padres de la última víctima del destripador, la joven estudiante Jackie Hill, hicieron un llamamiento por la televisión al público para que prestase toda la ayuda posible para la captura del asesino. Las posteriores llamadas telefónicas saturaron las líneas telefónicas del cuartel general de la policía en Leeds.
En otro programa de televisión, el psiquiatra Stephen Shaw, que había asesorado a la policía sobre el caso, opinó que se trataba de un psicópata, que volvería sin duda a actuar. El criminólogo Terence Morris añadió que era bueno que aumentase la tensión en Leeds, porque así el asesino tendría menos posibilidades de poder escapar.
La policía ha organizado un inmenso despliegue: más de doscientos detectives y 6.000 policías de uniforme, todos tras la pista del ripper. La semana pasada cambió el grupo que dirige la investigación, encabezando ahora las operaciones el comisario jefe Jim Hobson, cuyo equipo comenzó ayer a funcionar.
La población, por su parte, también se organiza. Los estudiantes de la Universidad de Bradford, en Leeds, se preparan para defenderse.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario